La historia de Chhay: 25 años presentando a Jesús a los estudiantes
Chhay nació en Battambang, Camboya, durante el régimen de los Jemeres Rojos de la década de 1970. Como resultado, enfrentó muchas dificultades durante su infancia, e incluso tuvo que huir a Tailandia como refugiado durante varios años. Chhay dice: «Estuve muy enfermo, casi a punto de morir. No podía caminar y mi madre tuvo que cargarme en hombros». Tras regresar finalmente a Battambang, a sus veinte años, Chhay comenzó a seguir a Jesús.
Lleno de entusiasmo por la buena noticia, Chhay quería fundar iglesias y presentar a su Salvador a más personas. Pronto descubrió por qué Camboya es uno de los países menos alcanzados del mundo: el pueblo camboyano no era receptivo al Evangelio.
Chhay intentó fundar iglesias, pero no tuvo éxito. Dice: «Iniciamos muchos 'puntos de luz', pero no sobrevivieron. No pudimos fortalecerlos lo suficiente como para que se convirtieran en una iglesia».
A medida que perseveró en el ministerio, se dio cuenta de que las generaciones más jóvenes tenían una mentalidad más abierta al cristianismo. En 2010, Dios guió a la Alianza Charis a comprar un antiguo edificio en pleno centro de Battambang, que se ha convertido en el Centro Grace. Actualmente, sirve como sede de la Alianza Charis del Sudeste Asiático, y Chhay dirige allí un ministerio que lleva a los jóvenes a Jesús.
Las escuelas de Battambang atraen a muchos jóvenes camboyanos de todo el país, y Dios le dio a Chhay la idea de ofrecerles alojamiento en el Centro Grace. La idea es brindarles a los estudiantes un lugar accesible donde vivir, a la vez que invierte en su crecimiento espiritual. A través de este ministerio, Chhay ha estado presentando a los estudiantes a Jesús y discipulándolos durante casi 25 años.
A lo largo de las décadas, Dios ha usado el Centro Grace para influir en muchas vidas y generar un impacto en la comunidad. El Centro Grace no solo ofrece alojamiento asequible, sino que también ofrece clases de inglés, informática y guitarra para ayudar a los jóvenes a desarrollar habilidades esenciales. También organiza eventos de alcance comunitario donde los participantes visitan aldeas para compartir el evangelio y enseñar la Biblia. Este enfoque holístico contribuye al desarrollo personal y espiritual general de los estudiantes, influyendo positivamente en la comunidad en general. Estamos muy agradecidos por lo que Dios ha hecho a través del Centro Grace en Battambang, pero Chhay nos recuerda: «Necesitamos más trabajadores con talento que trabajen bien con los estudiantes. Oramos para que Dios nos dé a la persona indicada».